3.05.2013

Nada en la vida es fácil: lo aprendes de tantos golpes que te das tratando de cruzarla discretamente. 
No creo que en días como hoy haya alguien que sepa esto tan bien como yo.
Busco las llaves en mi bolsillo y abro la puerta... 
deberías estar aquí. y recibirme con un abrazo y una sonrisa, y preguntarme que quiero de cenar.
mientras yo tarareo algo que escuche y que sigue dando vueltas en mi cabeza.
deberías llamarme de forma cariñosa y traerme una copa de vino... solo por hoy.
la cena esta servida; no es necesario una charla larga en la mesa, solo mirarnos y sonreír. 
Nada en la vida es fácil, pero espero que nuestras sonrisas lo sean. 
tomaría tu mano y la apretaría fuerte, como me enseñaste.
solo necesitaría que te recostaras junto a mi y leyeras algo en voz alta; lo que fuera. 
cerraría los ojos lentamente sabiendo que sigues aquí, que la vida es fácil junto a ti, que la felicidad es posible, que el universo no se equivocó y que sigo bendecida; aunque la vida no sea fácil, aunque me golpee fuerte, aunque pese a veces....
cierro la puerta.
(silencio)

2 comentarios:

  1. Nada en la vida es fácil y eso la hace más interesante...

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  2. algunas cosas deberían ser fáciles... esta, por ejemplo debería ser una de ellas.

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