5.22.2011

10! (di-ez)


Hace unos días (bastantes ya), abrí la puerta de casa y estaba él; 
lo mire fijamente y él simplemente subió la mirada y entró; como si mi casa fuera suya.
No supe su nombre, ni nada de él, solo que era así. Esa tranquilidad natural invadió toda la habitación, y yo no tuve otra opción que rendirme y respirar a otro ritmo.
Y así, entre la calma y el silencio, me fui poniendo cómoda en el suelo debajo de mi sofá; no pensaba en nada concreto, hasta que él se movió; en ese momento solo pude pensar en ti. Por un instante. 
Los instantes me sorprenden a menudo, me pierdo en ellos y sonrío; esta vez los instantes se unieron en uno solo y fui realmente feliz; tu y él, y yo debajo del sofá sobre la alfombra peluda. 
Olvide cerrar la puerta, y él salio por donde había entrado; lo deje irse, al fin y al cabo no me pertenecía, como nada o nadie le pertenece a ninguno. 
La vida es así; le dije hasta luego, por si alguna vez quería regresar; lo dije sinceramente y en voz baja, él seguro que escucho. 
-a veces lo espero-.

banda sonora:









4 comentarios:

  1. ...Hiciste bien en olvidarte de cerrar la puerta...

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  2. ABRIR! es uno de los verbos mas fascinantes que hay por estos días!
    y no solo por el hecho de pensar que todo puede entrar, mas bien por la posibilidad de tener flujo de algo! esa corriente continua que hace que las pelusas se vayan y se queden en un rincón!!! (EXTRAÍDAS LUEGO POR ALGÚN VENTARRÓN!)
    gracias Miguel!!! - espero que tu también te olvides de cerrar puertas!-

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  3. qué difícil es vivir en esta época posmoderna...

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  4. lo mas difícil de la posmodernidad es simplemente saber que es eso!
    luego ser una chica no posmoderna -sin haber llegado siquiera a la modernidad- en un mundo posmoderno es aun mas complicado!
    y ya el vivir se hace difícil!!!! uffffff!

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